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Sí. Esto ya es una tradición en Plata con Plática. Y aunque a mediados de este año hicimos un cambio importante en la línea editorial, sí habían cosas que queríamos mantener. ¡Como esto!
Mi nombre es Elaine Miranda. Soy la fundadora de esta plataforma de educación financiera que comenzó en el 2012 como un blog de finanzas personales. Cada año desde entonces, para celebrar mi cumpleaños con mis lectores, me he dedicado a responder la misma cantidad de preguntas que años estoy cumpliendo.
¡Así que este año vamos con 35!
¡Ah! Y si querés leer las preguntas de los años anteriores, lo podés hacer acá: 28 años, 29 años , 30 años, 31 años, 32 años, 33 y 34 años.
Tienen que haber metas. Si no hay metas de por medio, cosas importantes que querrás lograr (estudiar una maestría, viajar, comprar una casa / carro, poner un negocio, etc.), gastar se hace fácil porque, ¿por qué no hacerlo?
Así que yo empezaría por ahí. ¿Qué cosas no estoy logrando, o cuáles son mis fuentes de infelicidad, por no tener el dinero? De ahí, el presupuesto donde des un destino con propósito a cada centavo ganado, es tu aliado #1. Acá podés descargar gratuitamente uno.
De hecho, me encanta que estés pensando en esta parte. Tanto porque el seguro médico es súper importante como parte de la planificación financiera personal, como porque al emprender, hay muchos gastos (como este) que nos tocan por nuestra cuenta.
Si tenés un gran seguro médico que en este momento tu empleador te paga, considerá su pago dentro del salario que SÍ debés pagarte mes a mes. Quizá de entrada no podás pagar el mismo, pero podrías comenzar por uno más básico e ir escalando después.
Creo que son dos deudas bastantes comunes que muchas personas acarrean, porque no todos pueden comprar casa o carro de contado. El asunto es ver el monto de ambos préstamos, cuánto suman y qué porcentaje de tus ingresos implicarían. ¿Son más del 30%-35%? Si es así, podrías estar en aprietos. Así mismo, aunque nada está garantizado, todos tenemos una idea bastante buena de qué tan “seguros” o qué tanta incertidumbre nos generan nuestros trabajos.
Mi querida Gaby: estoy convencida que ustedes en el ICR, en Costa Rica, han hecho un trabajo simplemente extraordinario con las personas a través de su programa de educación financiera. Creo, más bien, que todos tenemos mucho que aprender de ustedes y que ese programa podría / debería ser replicado en el mundo entero.
Efectivamente, los cambios en la vida financiera no se tratan solo de “números” o de “salir de deudas”; se requiere todo un trabajo de auto-conocimiento, introspección y de mejorar nuestras soft skills para que esos cambios sean duraderos. ¡Un abrazo, mi Gaby!
Precisamente debemos aprender de esta(s) crisis y la frugalidad en la que quizá hemos vivido. De las mayores lecciones deben ser que sí podemos vivir con menos y que muchas de las cosas que considerábamos necesarias no lo son. El presupuesto, uno ajustado, donde el ahorro tenga un lugar protagónico será tu mejor aliado.
No soy experta en bienes raíces jeje, así que quizá mi consejo no sea el más acertado y lo ideal sería buscar a alguien que sí lo es. Algunos puntos a considerar:
La tarjeta de crédito NO es para pagar emergencias, ni es para usarse “en cosas necesarias cuando ya no hay dinero”. Simple y sencillamente porque la tarjeta de crédito no es dinero extra, ni fondo de emergencia; es un medio de pago más y es una forma para financiarte a corto plazo.
Te recomiendo descargar este Ebook gratuito con TODO lo que debés saber sobre las tarjetas de crédito. Solo hacé clic acá.
En general, no hace daño tener cuentas en varios países. Pero esto dependerá de los planes de la persona. ¿Va a regresar? ¿Planea quedarse a vivir en el otro país?
Dependerá de la seguridad del empleo / ingresos. Si se sienten seguros, nunca está de más hacer abonos extraordinarios para pagar menos intereses y salir antes de la deuda. Pero si no se tiene seguridad sobre el ingreso o bien no existe NADA de fondo de emergencia, es más importante empezar por ese ahorro que volverse loco tratando de abonar más.
No soy anti-deuda, pero sí la evito. Financiar un negocio a través de un préstamo no necesariamente es mal y, dependiendo del negocio mismo, a veces es la única manera. Pero no podemos obviar que un préstamo pone presión financiera a un nuevo emprendimiento y que debemos tener claridad sobre la rentabilidad que vamos a tener y el flujo que vamos a generar para saber que vamos a poder pagar esa cuota.
Personalmente, prefiero comenzar de pequeño con un Producto Mínimo Viable y con mi propio dinero, a empezar acarreando deudas.
¡Me encanta esta pregunta! Y de verdad, he aprendido muchísimo.
A veces pensamos que nuestros gastos son mayores que nuestros ingresos, pero se nos olvida que nosotros, día a día, lo decidimos así.
Para que el ahorro suceda este debe ser una prioridad en nuestra vida y nuestro presupuesto. El problema es que la mayoría lo dejamos “para el final”, para “lo que sobre”. Y pues nunca sobra nada.
Ahora, ciertamente hay un buen % de la población, con un salario mínimo, para quienes ahorrar es simplemente imposible y lo único que puede hacer es intentar vivir dentro de sus posibilidades.
Por supuesto. Muchas, muchas veces. Y muchas veces más he querido tirar la toalla también :).
¡Ufff! Lamento mucho que te haya pasado eso. Si se te fueron todos los ahorros ahí y tu fondo de emergencia está en 0, yo comenzaría por ahí. Pues no tener un colchón te pone en una situación de muchísimo riesgo. Después de un fondito mínimo, podés comenzar a pagar.
Pues no soy economista jeje, así que no sé si mi opinión sea la más válida. Pero sí creo que el 2021 será un año difícil para Nicaragua. Ahora, en cuanto a iniciar un negocio: hay muchos negocios que han iniciado precisamente durante una crisis y otros que hasta les ha ido mejor. Entonces habría que evaluar qué tipo de negocio es :).
Respuesta corta: me vuelvo loca, jajaja. La verdad es que no sé si hago un buen trabajo distribuyendo mi tiempo entre nuestras empresas (Plata con Plática y Origami Brand Studio), la casa y Luka… sin contar que Lorenzo nace en 2 meses.
Pero sí trato de tener mis prioridades en orden:
Luka es mi prioridad #1 y mi trabajo más importante porque solo tiene una mamá. Todo lo demás puede ser delegado y trabajado por otra persona. Así que cada día dejo un espacio para él: salir a caminar por las mañanas, comer con él, leerle un libro, llevarlo a clases de natación, dormirlo, etc. La mayor parte del día, realmente, la paso trabajando (como todos, ¿no?) y luego bajo todos los santos del cielo para que las cosas de la casa funcionen de la forma más eficiente posible.
Tengo un seguro de vida internacional con una empresa llamada BMI. Dando clic acá podés leer todos los detalles del mismo y cómo comprarlo / cotizarlo.
El mejor seguro de vida es el que tu presupuesto pueda pagar. Siempre digo que los seguros NO son lugar para ahorrar. Al contrario, son de los rubros donde más debemos destinar. Ahora, existen diferentes tipos y dependerá de tus metas personales. Dando clic acá podrás leer cuáles son esos tipos.
¡Claro que sí! Y se viene más poderosa que nunca. Estamos muy contentas con el trabajo realizado este año. Este 30 de octubre sale a la venta, para que desde ya lo metan al presupuesto ;).
En nuestro caso, nosotros manejamos finanzas 100% compartidas. En términos prácticos eso sí quiere decir que yo administro casi todo. Compartimos cuentas (aunque Yass nunca las ve), y desde esas mismas cuentas se hacen todos los pagos. Sí me gustaría que Yass estuviera más presente en esas decisiones, pero puedo decir que en general nos ha sido exitoso el método :).
Todo empieza por las metas en común, lo que como pareja quieren lograr, porque para eso es el ahorro. Hay diversas maneras de llevar las finanzas en pareja, a mí personalmente me gusta, me funciona y recomiendo las finanzas 100% compartidas. Tenemos un Ebook completo sobre finanzas en pareja que te recomiendo leer. Lo podés descargar acá.
Yo tengo ambos:
Y también hay planes que los combinan. Recomiendo, como con todo lo demás, hacer bien tus averiguaciones, cotizar, comparar precio VS beneficio y tomar tu mejor decisión.
¡Qué buena pregunta! Fijate que aunque sí saco a Luka en mis redes (sobre todo en las historias de Instagram), también trato de ser cuidadosa con lo que comparto. Por ejemplo: casi siempre sale comiendo o jugando; nunca lo pongo en posiciones dramáticas, de berrinche, enojo o desnudo, jaja (también por un asunto de seguridad).
Creo que nos guste o no, y para bien o para mal, las redes sociales son parte de nuestra vida y creo que esa generación las seguirá viviendo así, por lo que probablemente esté acostumbrado a eso.
Hay otros límites que no cruzo, como el abrirle su propia cuenta y etiquetarlo jajaja… ya él decidirá cuando tenga edad si es algo que quiere o no. Y al final, probablemente habrán cosas que no le gusten y diga “mamaaaaa, ¿cómo fuiste a subir eso?”, pero es el equivalente de lo que nos pasa a nosotros cuando nuestros papás nos sacan fotos comprometedoras y se las enseñan a media mundo, jejeje :D.
Supongo que tendremos que esperar a ver cómo reaccionan de acá a unos años :).
Decirle a alguien si irse o quedarse es peligroso e irresponsable, jejeje. Cada quien sabe lo que está viviendo y cómo lo está viviendo.
Sí sé que aunque a veces la vida acá parezca difícil, vivir en otro país (sobre todo sin papeles) no es nada sencillo tampoco y también se sufre mucho.
Recordemos que las finanzas personales son PERSONALES, por lo que dependerá de cada caso y sus condiciones qué conviene comprar antes. Ahora, asumiendo igualdad de condiciones, que no hay ni lo uno ni lo otro, yo diría que la casa viene primero ;).
El mayor reto es balancear la vida, el tiempo y las obligaciones. Nuestros niños y niñas nos necesitan. No solo proveyendo recursos, comida y techo, sino ESTANDO AHÍ. Nadie les va a dar el amor y la ternura qye una mamá o un papá… aunque otras personas le puedan dar su tiempo.
En un mundo acelerado como el que vivimos, es fácil dejarse de llevar y perder de vista lo importante. Ellos crecen tan rápido, que debemos detenernos y estar, simplemente estar con ellos.
No digo que lo tengo 100% conseguido jajaj, pero sí es algo en elo que trabajo constantemente.
Como no soy experta en materia fiscal, le pregunté a mi amigo, el gran Theo Baez sobre esto. Literalmente me dijo:
“Ninguno. No hay beneficios. Pagan 3% pago mínimo y los están quebrando”.
¡Sí! La #PlatAgenda es nuestro bebé #1 y en esta cuarta edición le hicimos unos cambios y mejoras muy bonitas. Me va a matar el #TeamPcP por decirlo desde ya, PEEERO: ¡trae también una parte digital! Sale a la venta el 30 de octubre.
Siempre que se dan abonos extraordinarios vas reduciendo más rápidamente la deuda.
Hay un gran debate de si tu casa es o no una inversión como tal. Por un lado, definitivamente te vas a ahorrar el monto de la renta y al construirla con tu dinero no pagarías intereses en el banco (que es bastante plata). Pero no es una inversión per se, en el sentido estricto de la palabra porque no te está generando dinero ;).
Acá este post que te puede ayudar.
Definitivamente, si hay que financiar la casa, hay que hacerlo a través de un crédito hipotecario y no de un préstamo personal. La diferencia de la tasa de interés puede ser de hasta más del doble.
Lorenzo nace a mediados de diciembre :).
Decía mi mamá que lo único que ella me iba a dejar era eso: la educación. No bienes materiales, propiedades o herencia. Y es que la educación es tu legado, es tu herramienta, tu machote de trabajo. Lo que sabés nadie te lo puede quitar. Se acumula, se multiplica, se cambia y se lleva a cualquier lado.
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