Testimonio: Con educación financiera cambié de carrera, ahorré y emprendí

El siguiente post es colaboración de una lectora: Sofía Paz. Si te gustaría escribir un artículo de Finanzas Personales y/o emprendimiento en este blog, solo tenés que enviar un correo a [email protected]

Escribirte este correo para mí significa haber esperado pacientemente que muchas cosas se hayan sentado en su lugar para poder hacerlo. Te explico, yo te sigo desde hace aproximadamente 4 años, en ese entonces yo tenía alrededor de 20 o 19 años. Cuando mi vida financiera aún no había empezado, en términos de ser una persona que genera ingresos. Sin embargo, me llamaban la atención tus propuestas. Entonces, siempre estuve ahí, en silencio.

¿Cómo inició Plata con Plática a trascender en mi vida?

Bien, en febrero de 2017 decido dejar la carrera a la que le había dedicado 5 años de mi vida (no me detendré a explicar las razones por que no es lo relevante).

Como era de esperarse, mi madre, quien era mi responsable financiero en la universidad, lo tomó muy mal y a partir de eso se desencadenaron muchos cambios en mi vida. En aquel momento; supongo que, a raíz de la noticia tan inesperada, ella (mi mamá), decide soltarme la mano para que yo misma me haga responsable de mi vida profesional.

Después de una dramática reunión familiar, donde todos opinaban de mi futuro, comencé a apenas entender, y de manera muy confusa que ahora me enfrentaba a algo tan delicado como: yo misma.

Pues bien, sin saber qué era lo que exactamente iba a hacer, no me quedaba más que iniciar por lo que estaba a mi alcance, y eso era leer PcP. Por aquel entonces, te leía vorazmente. Aunque no tenía ingresos de ningún tipo, sabía que lo mejor que podía hacer era educarme con respecto al tema, que yo más claro que el agua lo tenía: el ahorro.

En noviembre de 2017 recibí de regalo de cumpleaños la #PlataAgenda18. En diciembre de ese mismo año, inició mi búsqueda por un empleo. Como yo era quien se encargaría de mí misma, entonces no podía iniciar a estudiar inmediatamente, debía trabajar y ahorrar. Asombrosamente, conseguí un trabajito donde no ganaba nada mal para ser el primero de mi vida. En enero 2018 inicié a trabajar. Estaba lista para iniciar a ahorrar.

Yo no te puedo explicar lo minuciosa, perseverante y estricta que fui con mis cuentas (tenía una para ahorro universitario, una para el desafío del ahorro). Tenía los objetivos claros e iba por ellos sin perder el norte. Así pasaron 9 meses de trabajo arduo y cuentas llenándose gota a gota.

Claro, no planifiqué qué hacer en casos de crisis nacional, y ello me obligó a parar súbitamente mis planes de ahorro 🙁

Me fui de la empresa en la que estaba y a pesar de no tener las manos vacías sabía que mis planes irremediablemente se habían truncado. Incluso, hasta llegué a pensar que no lograría poder estudiar en 2019. Sí, no lo niego, el pesimismo y victimismo me abrazaron por un buen tiempo y no sabía qué hacer.

Lo curioso y lo que más me sorprende de esta historia es que, al iniciar con mis planes de ahorro, yo “sabía con certeza” qué carrera ahora estudiaría y en qué universidad. Pero dada la crisis cambié de opinión. Entendí que una vez más en mi vida, iba a cometer el error de estudiar algo para lo que soy apta, pero no para algo que me mueve fervientemente el corazoncito. Sé que las crisis no son positivas para el desarrollo de un país, pero si esto no hubiera pasado, yo habría seguido mis planes erróneamente. Quizá con esto quiero dar a entender que no todo es negro en estas situaciones. No lo fue para mí.

Cuando comienzo a investigar dónde puedo estudiar lo que ahora sé que es para mí y cuánto costaba, me doy cuenta que vale más del doble de lo que quería (jajajajaja). La primera vez que lo investigué pasé la página y dejé de pensarlo como una opción para mí.

A esta altura de la historia, quiero recalcar lo importante que ha sido tu enfoque en mi vida acerca de que, las mejores -o la mejor- inversiones que uno puede darse es la educación. Ello socavó mi mente e hizo que yo adoptara una actitud no pesimista, aún con todo y crisis encima. Y no es que exista una receta para recomendarla y que los demás la sigan, realmente no existe. Pero sí existe la fe y me aferré a ella.

Entonces, sucedió esto: el día que voy a depositar mi liquidación, ahí estaba Sofía haciendo fila en el banco, sin saber qué hacer, viendo a todos lados, con mil pensamientos pasándome como nubes en la cabeza. ¿Sabés que los bancos tienen tv donde ponen su publicidad? Bueno, me quedé viendo el televisor por largo rato, hasta que apareció un anuncio que decía: INVERSIÓN.

Y mi momento Eureka llegó: ¡claro! ¡yo debía poner mi dinero a trabajar! ¡y hacer que mi dinero me dé más dinero!

Salí con una sonrisa, aún sin saber exactamente qué hacer. Pero con una idea en la cabeza, eso ya era un avance. Yo había querido emprender, desde muy pequeña, pero no sabía en qué, ni cómo, ni nada.

Como era obvio, empecé a leer PcP acerca de inversiones y emprendimiento, todo lo relacionado a ello. Entonces me lancé a emprender, en mera crisis nacional, y con un poquito de plata en mano. Así, nació SOBRIA, que es una tienda online (por el momento) de ropa second hand. Y aunque aún no es todo lo que tengo planeado para ella, gracias a Dios he tenido buenos resultados.

Para ir terminando este cuento, me aconsejé no abandonar mis metas y no dejarme llevar por el miedo. Así, fui y me matriculé en la universidad que quería, en la carrera que quería. Y solicité beca.

Ayer me dieron la aprobación parcial de mi beca y yo no puedo estar más feliz. Asombrosamente, mi madre cambió de opinión y me dijo que me ayudaría con las mensualidades de la universidad. Aunque el monto mayor aún sigue siendo mío, en este punto no deseo que las cosas sean de otra manera.

Tengo 24 años, un emprendimiento que está muy bebé, ganas de salir adelante y una #PlataAgenda19 en las manos, estoy completa.

Sin lugar a dudas, nada de esto habría sucedido si no me hubiese topado con vos. Estaré eternamente agradecida por los planes que Dios ha tenido para tu vida, y así, bendecir la mía. Gracias Elaine.

Y estas han sido las crónicas de mi vida desde 2017. Considero que si he llegado hasta aquí es por que algo estoy haciendo bien, ¿cierto? Seguro notaste que esto ha sido un tema holístico; he pasado de enfrentar mi realidad, mis emociones, retar mi fe y educarme financieramente. No todo se ha tratado de dinero es este juego. Y si algún día alguien me pidiera un consejo, le diría exactamente esto: caminar sin ver atrás, se trata de autodeterminación, fe y rodearte de gente que te inspire. Y te recomendaría, claro jaja

Un fuerte abrazo,

Sofía Paz.

Comentarios

Artículos relacionados