9 movidas tontas de dinero que debés evitar

primer paso

Si alguien te dijera tonto o tonta, probablemente te sentirías ofendido, ¿no es así? De hecho, lo más seguro es que sintás que, en general, actuás de forma inteligente. Sin embargo, cuando se refiere al dinero –y la falta de educación financiera- es común que hagamos unas cuantas movidas de dinero que terminan siendo tontas y no nos ayudan a lograr la vida que queremos.

A continuación te presento las 9 más comunes y cómo las podés evitar.

1. Tener un saldo sin pagar en tu tarjeta de crédito, teniendo efectivo en el banco: Las tarjetas de crédito son herramientas poderosas y te pueden dar excelentes beneficios, pero es tonto, tonto -¿ya dije tonto?- mantener un saldo sin pagar. Es incluso más tonto tener un saldo sin pagar cuando se tiene dinero en el banco.

Tu cuenta de ahorros está haciendo alrededor del 1% anual y la tasa de interés de tarjetas de crédito puede andar alrededor del 25 y el 50%, ¿no? Matemáticamente, no tiene sentido dejar el dinero languideciendo en tu cuenta ahorros. Por supuesto, tampoco te conviene estar sin un colchón de emergencia, pero es necesario pensar dos veces antes de unirse a los hogares que mantienen un saldo sin pagar en la tarjeta cuando tienen el dinero sentado en el banco.

2. Endeudarte por artículos que pierden valor: Comprar una casa con una hipoteca (como hacen casi todos) puede ser una movida financieramente inteligente porque casi siempre va a tener una plusvalía a medida que pase el tiempo. Pero ponete a pensar en tu tarjeta de crédito: ¿Qué compraste con ese plástico? ¿Todavía lo tenés? Si aun lo tenés, ¿lo podrías revender por el precio que lo compraste?

Me arriesgaré a decir que la respuesta probable a esas dos últimas preguntas son “no” y  “definitivamente no”. Así, en lugar de endeudarte y pagar un interés altísimo por artículos que rápidamente tirás, olvidás o pierden su valor, ahorrá tus centavos y pagá por ellos en efectivo. Si no sabés cómo, puede que estés cometiendo la movida tonta #9 ;).

3. Comprar algo nuevo que pudiste haber comprado usado: En definitiva hay muchas cosas que es necesario comprar nuevas, porque usadas podrían salir mal y terminarías gastando más. Sin embargo, hay muchas otras cosas, desde ropa hasta carros, que usualmente podés encontrar en perfecto estado y a una fracción del precio. 

En este artículo podés encontrar una lista de las 10 cosas que más vale la pena comprar usadas.

4. Gastar dinero en cosas que rara vez usás: Peor que comprar algo nuevo cuando lo pudiste haber comprar usado, es comprar algo que solo vas a usar una ó dos veces al año. Hay muchos ejemplos de este tipo de compras que hacemos, algunas de las que se me vienen a la mente son vestidos carísimos que vas a usar una sola vez en una fiesta o herramientas para componer algo que después de eso, no le vas a dar uso.

Muchos de estos artículos los podrías alquilar o prestar y evitarte así, no solo el costo inicial, sino también de su mantenimiento y de tenerlos almacenados durante años y años.

5. No cancelar suscripciones de prueba: Y aquí tengo que admitir que soy culpable. Hace algunos años  Amazon tenía un mes de prueba para entregarte los productos en un día. Te pedían tu tarjeta de crédito para hacerte el cargo pasado el mes, a menos que lo revirtieras. Se me olvidó, se me pasó la fecha y terminé pagando el año entero de un servicio que no usé.

Incluso podría ser que estés pagando suscripciones que no son de prueba, pero que no estés usando y es momento de cancelarlas.

6. Firmar contratos que no entendés: Esto parece más común cuando se trata de hipotecas y préstamos de autos. Muchas personas aceptan tasas variables  y luego parecen sorprenderse cuando llega el cobro con una tasa más alta.

Por supuesto, no es el único caso. Puede suceder que comprés un seguro de vida, gastos médicos mayores y plan de ahorro para el retiro sin saber exactamente a qué te estás metiendo.

7. Olvidar tener un fondo de emergencia: Es tonto ir por la vida sin un colchón al que recurrir. Necesitás un plan B para poner en acción en caso de que perdás tu trabajo, tu hijo se enferme o tu carro se arruine; y uno de los mejores planes B que podés tener es dinero en el banco al que recurrir. 

El otro colchón que necesitás son los seguros adecuados. Esto va a depender del tipo de persona que sos y tus características particulares, pero lejos de pensar que los seguros son un gasto innecesario, siempre terminan siendo una gran inversión que nos respalda en el momento que más necesitamos.

8. Pagar más por tener deducibles bajos:  Asumiendo que tenés algo de dinero en el banco, subir el monto de deducible en tus seguros es una excelente manera de ahorrar. 

¿Cómo así? En Estados Unidos, por ejemplo, subir el deducible de tu póliza de auto de $200.00 a $500.00 podría ahorrarte de 15% a 30% del total pagado. 

9. Vivir sin un plan: La última movida tonta de dinero que la mayoría comete es vivir sin un plan financiero y suele ser también la movida tonta que puede estar relacionada directa o indirectamente a las ocho anteriores.

Quizá estás pensando que escribir metas financieras o un presupuesto es aburrido, complicado o deprimente… yo creo que es más bien tonto usar esas palabras como excusas para no hacerlo.

Si no estás seguro o segura de por dónde comenzar, en este blog podés encontrar muchísima información para ayudarte. Te recomiendo empezar por este sobre cómo hacer tu presupuesto. 

¿Y vos? ¿Con cuántas de estas tontas movidas de dinero te identificás? ¿Qué cambios estás dispuesto o dispuesta a hacer?

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