La importancia del personal branding cuando sos freelance

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El prospecto de una vida laboral independiente es cada vez más atractivo en estos días. Desde profesionales con muchos años de experiencia, cansados de sus lugares y puestos de trabajo, hasta los recién graduados universitarios, son quienes se entusiasman con la perspectiva de establecer su propio horario y trabajar desde la comodidad de su casa.

Es más fácil decirlo que hacerlo, ¿no? Así como sucede cuando pensamos en montar un negocio, considerar trabajar por tu cuenta puede convertirse en ese sueño difícil de realizar. El miedo siempre está presente y la posibilidad de fracasar es tan alta que en la mayoría de los casos preferimos quedarnos en nuestra zona de confort y no lanzarnos a hacer eso que nos apasiona.

Y esa palabra es, para mí, el ingrediente principal: pasión. Si vos no estás apasionado por un tema, negocio o industria en particular, difícilmente lo vas a poder lograr. El comienzo va a ser difícil; te lo digo yo que estuve a punto de tirar todo a la basura, justo antes de comenzar a ver las cosechas de lo que había pasado dos años sembrando. Sin embargo, en ese trayecto la perseverancia y la disciplina son tus mejores aliadas. Si te lográs mantener, los frutos van a valer más la pena que cualquier otro trabajo de 8am a 5pm que consigás.

Claro, no solo la perseverancia y la pasión son suficientes. Hace falta mucho trabajo, empeño, diligencia y, como en cualquier otra empresa, saberte mercadear. Aquí es donde entra el personal branding

¿Qué es eso del Personal Branding?
En palabras sencillas, yo diría que se trata de identificar y luego comunicar eficazmente aquello que te hace único o única, relevante y diferente para ese nicho de mercado que a vos te interesa. Si lográs conocer e interiorizar tus fortalezas, habilidades, pasiones y valores, podés usar esta información para separarte de tus competidores y sobresalir. Pero para ello, debés de conocer cómo, a través de qué y a quiénes comunicarles tus características personales y profesionales.

Al final, independientemente de tu edad, posición o negocio en el que estés, todos y todas debemos reconocer la importancia del branding personal. Somos CEOs de nuestra propia empresa: “Yo, S.A”. Para trascender en el mundo de los negocios hoy, debés ser el mejor vendedor de la marca YO.

¿Cómo se hace?
Tu objetivo al mercadearte es ser conocido por lo que sos, lo que representás y lo que podés hacer por los demás. Tu marca personal online y offline deben ser un fiel reflejo del valor que podés dar a los clientes y a las personas en tu red profesional. Funciona más o menos así: si vos sos excelente creando ideas y dando asesorías a empresas en temas de comunicación estratégica, tu meta es convertirte en lo primero que las personas piensen cuando haya algo que decir al público respecto a este tema. Llegar a ser una marca en la mente de quienes están interesados en estos asuntos. Si tu pasión es la seguridad ciudadana, entonces debés convertirte en la referencia de cajón para quien quiera hacer una investigación, entrevista o documental sobre el tema.

El plan de branding personal que armés te debe servir como un mapa en el camino hacia el éxito y estará ahí como referencia a lo largo del viaje. Así, tus acciones y comunicaciones deben estar acorde a la consistencia y autenticidad de tu marca, de quién sos y de lo que podés hacer profesionalmente.

Y como nada es fácil, es necesario tener claro desde un principio que darte a conocer va a tomar mucho esfuerzo, tiempo y otros recursos, por lo que solo un plan de acción a largo plazo con un mensaje consistente te asegurará que cada día estés más cerca de tu meta. A mí, por ejemplo, me conocen como alguien que sabe de finanzas personales porque es sobre lo que escribo, hablo y trabajo. Si de repente se me ocurriera, por ejemplo, comenzar a dar tips de belleza, mi mensaje no sería consistente y las personas se sacarían de onda al no saber entonces cuál es mi pasión, qué es lo que hago y qué valor agregado les puedo ofrecer.

De esta forma, es importante que siempre tengás a tus clientes potenciales en mente cuando busqués reconocimiento en tu área de expertise. Asegurate que tu nombre deje una impresión positiva duradera que te destaque de la competencia. Para tener una gran marca no solo tenés que ser bueno en lo que hacés, también tenés que ser diferente. Esa diferenciación normalmente viene de enfocarte en un nicho de mercado particular y dominarlo… bien dicen que el que mucho abarca, poco aprieta ;). Y también requiere que tu estilo de trabajo y tu capacidad creativa sean, en sí mismas, valores agregados de tu oferta profesional.

A medida que el tiempo vaya pasando, vas a ganar credibilidad, respeto y admiración cuando tu nombre se mencione a personas en tu público objetivo. Mantenerte visible tanto online como offline te dará el status de experto o experta y la fuerza de tu marca te ayudarán a sobresalir en tu industria.

En conclusión, el branding personal es una revolución en la manera en que manejamos nuestras carreras o negocios. Significa identificar y comunicar lo que te hace único o única, relevante y convincente para que podás alcanzar tus objetivos. Desarrollar tu marca personal significa utilizar lo que sos para conseguir lo que querés de la vida y si sos –o querés ser freelance- es una parte imprescindible en la que tenés que trabajar desde un comienzo: la gente a tu alrededor te tiene que reconocer por aquello que vos sabés hacer.

En un próximo post te estaré contando algunas ideas de cómo hacerlo y el rol que juegan las redes sociales en tu estrategia.

 

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