Tengo una sola tarjeta de crédito, y es con el BAC. No porque crea que su servicio sea particularmente mejor que el de otros bancos, sino porque cuando finalmente decidí tener una, fueron los primeros en ofrecérmela –¡y gratis!-.
Debo confesar que no soy un cliente rentable para ellos. No pago anualidades (recuerden que me la dieron gratis), y como siempre cancelo el 100% de mis compras dentro del periodo de gracia, tampoco ganan intereses. Casi todos los días recibo un correo del banco que dice “Promociones Credomatic”, el cual elimino inmediatamente sin siquiera leerlo.
Sin embargo, la semana pasada recibí uno que me llamó la atención y decidí abrirlo. Decía “¡Compra en cuotas sin intereses con Credomatic!”
Por pura curiosidad decidí hacer click para ver el listado de comercios donde se podía comprar y ¡realmente eran muchos! La lista consistía de 4 páginas de Word con columnas dobles, con empresas de todo tipo como: agencias de viaje (para aquellos que quieren viajar por el mundo), empresas de comunicación y tecnología (para los que creen que deben comprar una computadora nueva cada año), clínicas de salud (desde dentistas hasta cirujanos plásticos), educación (esto podría valer la pena), entre otros…
Al ver el anuncio, me pregunté ¿cuántas personas realmente hacen uso de esta promoción? ¿Cuántos de ustedes reciben el mismo correo que recibí yo, y corren a comprar un nuevo T.V., un mueble o ropa? Y ¿cuántos de ustedes realmente terminan pagando 0% de intereses? Por eso, hoy escribo este post. 👇
No me malinterpreten, no los están engañando, pues el banco realmente los está financiando a “x” meses sin intereses. Sin embargo, esta promoción puede ser o muy útil para financiar tus compras o un completo desastre para tus finanzas. ¿La diferencia? La manera en que funciona nuestro cerebro.
Cuando escuchamos “Meses sin Intereses”, nos suena casi casi a que es “GRATIS”. Nos parece un negocio increíble! (y está comprobado que el cerebro humano se estimula cada vez que percibe que está haciendo un buen negocio o que está aprovechando una ganga). Entonces, ¿cuál es la trampa? El secreto es: el nivel de endeudamiento.
Les pongo un ejemplo. Supongamos que deciden comprar una cama que cuesta $480 dólares (con IVA incluido), sacamos la cuenta que a 12 meses sin intereses, sólo tenemos que pagar $40 dólares al mes: “Una ganga”, pensamos. Pero, ¿qué pasa si llegada la fecha en que tenemos que realizar el pago de los $40 dólares, se nos olvida? ¿O resulta que no tenemos, y decidimos pagar solamente el mínimo?
¡En ese momento, los intereses empiezan a correr! Si de los $40.00 que debías pagar, pagaste $15.00, el banco te va a cobrar intereses (el mismo interés altísimo que te cobra la tarjeta de crédito sobre cualquier compra) sobre los $25.00 restantes; y adiós “meses sin intereses”, tu compra ya te empezó a costar más de lo que creías y ya dejó de ser el negociazo que habías pensado. Además recordá que esos $40.00 van a ser un cargo constante todos los meses y que no vas a poder seguir gastando lo mismo en tu tarjeta, porque corrés el riesgo de no poder llegar a cubrir ni siquiera el mínimo.
Por otro lado, estas famosas compras a tasa 0% tienen otro pequeño detalle: el monto de tu compra debe estar disponible en tu tarjeta de crédito. Volviendo al ejemplo anterior de lo $480.00 dólares, esto quería decir 2 cosas:
- Tu tarjeta de crédito debe tener como límite de crédito al menos ese monto; sino, no podrías comprar.
- Ese monto debe estar también disponible. Es decir que si tenés una tarjeta con un límite de $1,000.00 dólares, pero estás endeudado y debés $600.00 en ella, realmente solo podrías ocupar $400.00 y, por lo tanto, tampoco podrías realizar esta compra.
La razón de esto es que el monto queda congelado en tu tarjeta y cada mes, a medida que vos vas pagando, el monto se va liberando. Acá un ejemplo con un límite de $1,000.00 dólares –que están libres– y una compra de $480.o0 de un TV:
Otro de los peligros es quedarte pagando eternamente. Si por ejemplo usás esta promoción para comprar los regalos navideños, para cuando llegue la siguiente Navidad, apenas estarás terminando de pagar las compras del año pasado, y podrías entrar en un círculo vicioso sin fin.
Usar los meses sin intereses puede parecer una gran idea, y de hecho puede llegar a serlo, en la medida que quien los use los sepa administrar. Mi consejo: Aprovechá este tipo de promociones cuando tengás una compra planeada –y presupuestada-, sabiendo de dónde van a sacar el dinero para pagar, y no olvidando realizar tus pagos en la fecha correspondiente.
¿Y vos? ¿Has hecho uso de esta promoción antes? ¿Qué compraste? ¿Realmente pagaste 0% de intereses?