Acabo de terminar de leer un libro que le recomiendo a cualquiera que quiera poner un negocio, y que, ya sea por la falta de una idea concreta o por la percepción de que no se tienen los medios necesarios, no se ha animado a hacerlo.
El libro se llama “The $100 startup” y cuenta, en términos simples y sencillos –así como hablamos nosotros-, la historia de miles de personas alrededor del mundo que empezaron diferentes tipos de negocios con un capital menor a $100.00 dólares. Para mí, las palabras de Chris Guillebeau fueron realmente inspiradoras…. cada vez que daba vuelta a una página me daban ganas de empezar un negocio en ese mismo momento!
Además del libro, el autor ha creado una página web con el mismo nombre, donde pone a disposición del público incontables herramientas – ¡GRATIS!- para emprendedores que se están preparando para empezar un negocio o que ya llevan algún tiempo manejando su empresa y quieren cambiar o mejorar algo.
Como sé que no todos van a salir corriendo a Literato ahorita a comprar el libro, me he dado a la tarea de resumirles algunos puntos que me parecieron importantes y útiles, relacionados con el surgimiento de ideas y el tipo de negocio que conviene crear.
Me he enfocado en este tema específicamente porque en este trayecto de casi 1 año, por lo menos tres veces al mes recibo en mi correo, lo que yo llamo la pregunta del millón, y dice algo así: “Tengo un espíritu emprendedor y quiero poner un negocio, pero no sé en qué…. ¿me podrías aconsejar qué negocio es viable/factible/rentable en Nicaragua?”
Como se podrán imaginar, no hay una respuesta fácil ni correcta para esta pregunta, empezando por el hecho de que si yo supiera el negocio más rentable y se lo recomendara a TODOS los que me preguntan y ellos emprendieran….dejaría de ser rentable. Para mí, el negocio o trabajo perfecto es aquel que tiene las siguientes características:
- Convicción: Vale la pena hacerlo.
- Capacidad: Lo puedo hacer bien.
- Pasión: Amo hacerlo.
Basado en esto, ese negocio ideal es diferente para cada persona, porque todos somos diferentes y tenemos diferentes gustos, pasiones, habilidades y experiencias.
Así, para Chris G., tu idea debe surgir de una convergencia entre lo que querés y podés hacer u ofertar, y lo que la gente está dispuesta a pagar. La pregunta más importante que te tenés que contestar es: “¿Cómo voy a ayudar con este negocio a las personas?” Me encanta su perspectiva de que, en la medida que yo –a través de mi empresa- ayudo a más personas, mejor me va a mí también.
Valorando tus ideas de negocio
Si son varias las ideas de negocio que estás considerando y no sabés cuál te conviene más, podés hacer una pequeña encuesta a tu alrededor, para ver la reacción que tienen las personas ante tus planes. Esto es importante porque a veces creemos que tenemos una idea brillante y original, nos lanzamos al mercado y luego nos damos cuenta que a nadie le gusta o necesita lo que estamos ofreciendo.
Esto tampoco quiere decir que vas a decidirte por el negocio que la gente de te diga “es buenísimo”, primero porque tu motivación para emprender en determinada industria es vital y segundo porque está comprobado que la gente no siempre quiere lo que dice que quiere 😉
Tu encuesta podría verse algo así:
Matriz de decisión
Como dije anteriormente, no podés basar tu decisión meramente en lo que la gente te diga. La siguiente matriz te permite evaluar objetivamente tus opciones y separar aquellos proyectos que parecen ganadores de aquéllos que tal vez podés retomar en otro momento.
En esta matriz, enumerás tus ideas en la columna de la izquierda y les asignás una puntuación del 1 al 5, siendo el 5 la puntuación más alta, a cada uno de estos criterios:
Impacto: ¿Cuánto impacto va a tener este proyecto/idea en la sociedad/negocio/clientes?
Esfuerzo: ¿Cuánto tiempo y trabajo se necesita para crear este proyecto? (En este caso, un puntaje bajo quiere decir mayor esfuerzo).
Rentabilidad: En comparación a otras ideas, ¿cuánto dinero me va a traer este proyecto?
Visión: ¿Qué tanto se ajusta este proyecto a tu visión y misión general? Y acá les dejo un ejemplo que yo hice para mí:
Ahí lo tienen. Según esta matriz, lo que más me convendría en el tema de las finanzas personales es dedicarme al coaching o asesoría one-on-one y dar algunos cursos presenciales y talleres. Los invito a que ustedes también hagan sus encuestas y luego la matriz: ¡los puede ayudar a tomar la mejor decisión y dar el gran paso para emprender!
¿Y vos? ¿Cuántas ideas diferentes de negocios te han cruzado por la cabeza? ¿Qué te hace falta para dar el gran paso?