Temor, el socio de los que NO emprenden

Quiero contarles una historia. Cuando yo estaba en la Universidad tenía una súper amiga: Karla. Hacíamos todo juntas. Llevábamos las mismas clases todos los semestres, hacíamos los trabajos en grupo juntas, salíamos todos los fines de semana, dormíamos la una en casa de la otra, viajamos, lloramos, reímos -incluso llegamos a tener novios quienes, entre ellos, eran mejores amigos-. En fin, más que mi amiga, era mi hermana.

Karla y yo trabajábamos bien en equipo. Las dos éramos responsables y, como teníamos habilidades diferentes, nos complementábamos. Mientras yo redactaba los documentos en Word, ella era buenísima para hacer gráficas y presentaciones en Power Point. Pero lo más importante es que confiábamos 100% la una en la otra, así que lo que una hacía, la otra no lo revisaba y avanzábamos mucho más rápido.

Al llegar al 6to semestre de la carrera decidimos que queríamos poner un negocio. “Trabajar para una empresa no es lo mío”, “nada como ser tu propio jefe” decíamos. Tuvimos la suerte que, además, justo ese semestre teníamos que llevar la clase de “Proyectos de Inversión”, la cual consistía en –sorpresa!- hacer el plan de negocios para la creación de una empresa.

“La oportunidad perfecta!” pensamos. Íbamos a tomarnos la clase lo más serio posible y hacer un plan de negocios bien estructurado, (no únicamente para pasar la clase) porque en realidad lo pensábamos llevar a cabo.

Nuestra empresa se llamaría “White Smile”, y consistía en comercializar kits dentales (cepillos de dientes, pasta e hilo dental) a través de máquinas dispensadoras en varios puntos de la ciudad –de Guadalajara-. Realizamos toda la investigación necesaria: posibles proveedores, clientes, puntos de venta; así como todos los estudios pertinentes: Producto, Mercado, Técnico-Administrativo, Económico y Financiero, Análisis de Sensibilidad y Estimación del Riesgo y el Impacto Ecológico. Sin ánimo de ser arrogante, un trabajo muy completo! 😉

Para no hacerles el cuento largo, les transcribo el párrafo final de nuestro Resumen Ejecutivo: “Finalmente, por medio de todos los estudios, y como se podrá apreciar a continuación, hemos decidido que el proyecto sí es viable y que vale la pena invertir en el mismo, puesto que hay un mercado posible y además proporciona utilidades a las socias fundadoras”.

¿Y luego qué pasó? ¿Por qué no estoy en Guadalajara haciéndome millonaria vendiendo kits dentales? se estarán preguntando. La respuesta: empezamos a escuchar a personas a nuestro alrededor que nos decían que no iba a funcionar, algunos amigos -que veíamos de vez en cuando-, conocidos, nuestros súper novios incluidos, algunos familiares y nos desanimamos. Confiamos más en la opinión de personas externas que en nosotras mismas, en nuestra intuición y –sobre todo- en nuestro estudio.

Han pasado casi 6 años desde eso y Karla y yo aún nos arrepentimos de NO haberlo intentado. Ella sigue viviendo en Guadalajara, donde trabaja para una de las empresas donde íbamos a establecer nuestras máquinas expendedoras; y yo regresé a Nicaragua a trabajar para otras empresas y ahora estoy estudiando una maestría. ¿Dónde estaríamos si hubiéramos seguido nuestro sueño? No lo sé, ni lo sabré. Tal vez no hubiera funcionado y estaríamos en el mismo lugar. Tal vez sí habría funcionado y hoy seríamos empresarias exitosas trabajando para nosotras mismas, y ya habríamos incursionado en otros negocios. Aún hoy soñamos con ser socias y empezar algo… de qué? No lo sabemos. Pero probablemente a mi regreso hagamos ALGO.

¿La moraleja de la historia? Atrévanse! No tengan miedo a correr riesgos, ni a fracasar. Está comprobado que las personas se arrepienten más de las cosas que no hacen, que de las cosas que hacen –como es mi caso-. No esperen a tener más edad, mayor salario, más seguridad, más ahorros (o lo que sea que te detiene) para emprender. Si tenés un sueño el momento de empezar a trabajar en él es AHORA.

¿Y vos? ¿Has tenido experiencias similares? ¿Tenés el sueño de empezar un negocio y no lo has hecho? ¿Has desistido de invertir en algo en lo que creés por lo que te dicen otros? P.D. Les dejo acá el link de nuestro trabajo por si están pensando llevar a cabo un plan de negocios y quieren darse una idea.