Paneles solares: ¿inversión real o gasto de más?

El siguiente post es patrocinado por ECAMI

No sé si te pasa, pero los momentos en que más valoro la electricidad es cuando no está. La luz eléctrica es de esas cosas que damos por sentado y el día en que se va, arde Troya. O, bueno, al menos ardo yo 😅.

Recientemente -los últimos meses- me ha pasado que la luz en mi casa se va constantemente.

Estoy en una reunión por zoom y, de pronto, se apaga todo. Ah, se fue la luz. Adiós a mi reunión con el cliente.
Estoy dormida en la madrugada y, de pronto, uff qué calor. Ah, se fue la luz. Adiós a mi sueño.
Estoy por despertarme a las 4:00am para comenzar con mi rutina de lectura y escritura. Ah, no hay luz, mejor me vuelvo a dormir porque no puedo ver nada.

Y después, llega la factura y, como dice el meme, parecería que tengo un parque de diversiones en mi casa. ¿Algo de esto resuena con vos?

En más de alguna ocasión habrás visto anuncios sobre paneles solares, o habrás visto estos paneles sobre el techo de alguna empresa y quizás te preguntaste si los podrías colocar en tu casa, cómo funcionan, si realmente hay un beneficio en tu factura de energía eléctrica, etc.

Lo sé porque yo también me lo he preguntado y llevo un tiempo dándole vueltas a este tema, por lo que decidí echarme un clavado a averiguar y aquí te comparto lo que he descubierto.

Empecemos por el inicio.

Me da vergüenza admitirlo, pero confieso que ni siquiera tenía claridad de qué eran exactamente o cómo funcionaban. Resulta que los paneles solares son dispositivos que capturan la luz del sol, y por medio de un proceso llamado efecto fotovoltáico, toman esa luz solar y la convierten en electricidad que puede ser utilizada para alimentar electrodomésticos en nuestros hogares. Estos paneles se colocan en techos o en lugares donde puedan recibir mucho sol, o la luz solar incluso en días nublados.

¿Para qué sirven?

Los paneles solares son una de las soluciones más efectivas y sostenibles para la generación de energía: al ser una fuente de energía limpia y renovable, su uso contribuye a la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero.

Además, ofrecen múltiples ventajas económicas y sociales a largo plazo. Lo mejor es que la energía solar es abundante y está disponible al menos 11 horas al día todos los días, lo que te permite combinar la energía solar con la electricidad convencional en tu hogar, o sea, podés usar la energía solar cuando el sol brilla y recurrir a la red eléctrica cuando no haya sol.

¿Hay ahorro?

Los paneles solares te aseguran un suministro constante de electricidad y te permiten reducir tu dependencia a la energía convencional, con las siguientes ventajas:

Ahorro en tu factura mensual. Esto dependerá del tamaño del sistema de paneles solares en el que invirtás. Muchas personas logran reducir sus facturas de electricidad desde un 50% hasta un 100%.
Si bien la instalación de paneles solares requiere una inversión inicial, el ahorro en la factura de electricidad desde el día uno termina por cubrir el costo de instalación y mantenimiento de los paneles solares a mediano plazo.
Los paneles solares son activos que tienen una vida útil de más de 20 años y requieren de mantenimiento una vez al año, y el costo de este es mínimo.
Pueden alimentar una variedad de dispositivos en tu hogar, como electrodomésticos, aires acondicionados, o los bombillos de electricidad, o todos al mismo tiempo.
Te pueden ayudar a reducir el uso y costo de la electricidad convencional en horas diurnas (7:30-17:00). Por ejemplo, hacer uso de los electrodomésticos cuando el sol está bien intenso pues son los momentos cuando más energía solar se produce y pueda cubrir el consumo. A veces mover esas actividades de alto consumo energético a estas horas hará que el sistema funcione con mayor eficiencia.
Eso no significa que el ahorro termina ahí. Para las horas nocturnas (17:00 – 7:30) uno puede contar con el almacenamiento de la energía producida en el día con baterías de litio o plomo ácido, y de esta forma uno puede consumir esa energía solar en horas sin sol.

Veamos un ejemplo

Si sos como yo, seguramente viendo los numeritos de una familia real, todo se hace más fácil. Así que acá te va la experiencia de una casa en la zona de Esquipulas (Managua) que decidió instalar paneles solares:

Esta familia de 3 personas tenía un consumo total de 725 kWh al mes (promedio de los últimos 6 meses), es decir, pagaba una factura mensual promedio de C$ 7,500.00 córdobas.

La residencia cuenta con una cocina, 3 cuartos de habitación, 2 salas y una terraza. Como muchos, buscaban ahorrar luz energética en todo momento (limitando el uso del aire acondicionado, apagando las luces y abanicos, reduciendo el uso de los electrodomésticos).

Al instalar sus paneles, invirtieron aproximadamente US$7,000.00 dólares para un sistema fotovoltaico (solar) híbrido de 5.75 kWp para ahorro energético. El sistema está compuesto por:

1x Inversor Solis Híbrido de 6kW en potencia
1x Batería de litio Pytes de 4.8 kWh (para aprovechar en horas nocturnas)
10x Paneles Solares de 575W

El resultado

Los gastos energéticos han bajado a C$3,500.00 – C$4,500,00 córdobas por mes, que representan 350 kWh menos en consumo al mes aproximadamente.

El consumo energético de la red comercial se ha reducido en un 50%. Solo para su entendimiento , por si no lo saben, mientras más energía consumis, más caro se vuelve la tarifa. Eso significa que si reducís las escaleras de tu tarifa vas a reducir bastante la facturación energética. Se redujeron las tarifas más caras de la factura, la de C$13.32 y la de C$8.38:

225 kWh x C$13.32 = C$3,000.00 córdobas al mes
150 kWh x C$ 8.38 = C$1,257.00 córdobas al mes
Esto corresponde a $115.00-125.00 USD mensuales ahorrados.

A este ritmo, si el consumo energético se mantiene, en un periodo de 5 años habrán recuperado su inversión. Como bono: ahora tienen la libertad de utilizar el aire acondicionado, así como todos los electrodomésticos durante el día, sin ningún recelo energético.

Precio y tecnología los acerca más

Con relación a los costos, es importante que sepás que los paneles solares han reducido increíblemente sus precios en los últimos años, lo cual ha hecho que su adquisición sea muy accesible a nivel residencial. Además, la tecnología de los inversores solares permite una flexibilidad al usuario final para que pueda iniciar con una solución / inversión más aterrizada y accesible, de acuerdo con sus necesidades de consumo e ir expandiendo la instalación a una mayor capacidad fotovoltaica.

En pocas palabras, el avance tecnológico de los paneles solares no se está volviendo más caro, sino que más realizable y palpable para las personas y no solo a nivel comercial e industrial.

Testimonio:

“Antes andábamos como locos apagando todos los aparatos de la casa y teniendo mucho cuidado con el consumo de la casa. Ahora encendemos el aire acondicionado durante el día para aprovechar la energía del sol. Hacemos todas las tareas de la casa durante el día para no facturar con red. Estamos muy contentos con los ahorros y el trabajo que hizo ECAMI, disfrutando con tranquilidad nuestra casa”.

Después de leer estas ventajas, espero que ya estés pensando en poner paneles solares en tu casa para comenzar a ahorrar dinero. Sin embargo, es importante que sepás que la instalación no se hace por su propia cuenta, sino que debés ir donde especialistas para que te asesoren de acuerdo con las necesidades en tu hogar, de manera que garanticés el sistema solar que requirás sea seguro, eficiente y cumpla con todas las regulaciones.

Por ejemplo, en Nicaragua, ECAMI es una empresa especializada en el suministro de proyectos solares y te puede realizar el análisis de consumo y el costo de la energía para ofrecerte soluciones para el tipo y tamaño del proyecto, de acuerdo con las necesidades que tengas. Además de que te instalan, activan y te brindan un mantenimiento de los paneles solares que requerís para tu casa.