Los jóvenes y las finanzas personales: Que se preocupe mi yo del futuro

Hace unos días fue tendencia en X (antes Twitter) un joven mexicano que subió en su timeline el estado de deuda de su tarjeta de crédito con una cifra elevada -asumo en pesos mexicanos- y seguido de ello, muchas personas jóvenes, de diferentes países incluyendo Nicaragua, tuvieron el reconocimiento inmediato. Compartieron la imagen y agregaron comentarios como “se pagan con otra tarjeta” o “justo yo estoy igual, tengo solo 1000 disponibles”. El debate me hizo pensar: ¿cuántos jóvenes están en esa situación? o ¿cuántos hemos pasado por esa situación?

 

A veces pareciera que las palabras educación financiera y juventud no tienen nada que ver y es, hasta cierto punto, comprensible. Porque si es algo que no hemos visto en casa, el comenzar a corta edad a percibir ingresos, en un mundo acelerado y donde el consumo es vendido como una necesidad y no como un gusto, se pierde el objetivo y aplicamos el “para esto trabajo, solo se vive una vez” o la nueva, muy interesante “que se preocupe mi yo del futuro” tal como dijo el joven mexicano.

En este trabajo de las finanzas personales, brindar herramientas o dar conferencias sobre estos temas, me han permitido conocer muchas personas jóvenes, con historias de lo bien o mal que puede irles en este aspecto.

Desde la persona emprendedora que tiene un control absoluto de sus gastos, que plantea sus metas y ahorra para ellas, que aprende a vivir con lo que tiene y sí, tiene metas ambiciosas pero que las proyecta dentro de su plan de vida. Como en todo, está lo bueno y lo malo, tenemos el otro lado, el asalariado, que debe más de lo que gana, que considera las tarjetas de crédito una extensión de su salario y su vida no está financieramente estable.

Al final, podemos enfrentar un futuro sólido, con bases o un futuro incierto con baches. Por ello creo que los jóvenes tienen que hacer conciencia en tres puntos importantes entre la vida y las finanzas:

Desarrollo de herramientas para la vida

Hablar sobre las finanzas va más allá de saber que “2+2” es 4. Es aprender a tener control sobre ese monto que tengo de forma mensual desde el primer momento. A través de la mesada de mi papá, o la remesa que me envía mi mamá, o mis esperados primeros salarios, pero de forma consciente: presupuestando de forma mensual, ahorrando para tus próximas metas o invirtiendo para generar más ingresos de los que ya tenemos.

El desarrollo de estos pilares son los que nos pueden permitir hacer una proyección en la vida para esos planes anhelados: mi primer carro, la compra de mi terreno, el sueño de estudiar un posgrado.

CUIDADO con las deudas

Y sí, las deudas siempre podrán parecer la solución más rápida a nuestros problemas financieros o para poder adquirir herramientas para nuestro futuro. Si no hay un control de ello o conciencia de la responsabilidad que implica, pueden terminar siendo tu cruz de años o el círculo vicioso del que nunca se podrá salir.

Y no es que deban satanizar las deudas, si es cierto que fueron creadas para crear un impulso entre algo que querés o necesitás, que te permita pagarlo en un plazo mayor, sin embargo, una deuda tomada a la ligera o irresponsablemente, puede generarte el caos, sin distinguir la edad que tengás.

Decisiones responsables

La vida te comienza a poner pruebas aun siendo joven. Te puede tocar tener que tomar decisiones importantes y, si se trata de la parte financiera, podrían serlo aún más. Mientras más vamos creciendo, la magnitud de nuestras decisiones va cambiando. Por ejemplo, debés preguntarte con mayor seriedad ¿qué tarjeta de crédito me conviene más? o si ya estoy en la capacidad de adquirir mi nuevo carro con el impulso de un préstamo ¿qué diferencia existe entre un préstamo personal o un préstamo vehicular?

Necesitás tener todas las alertas encendidas y conocer de tu vida financiera, para que estas decisiones responsables contribuyan a tu vida y no se vuelvan una bola de hierro al tobillo.

Un curso para vos y los tuyos

Si bien es cierto que cuando sos joven merecés disfrutar de lo que ganás, también la vida no es tan corta como creemos y gran parte de los planes y las metas se consolidan acompañado de dinero, con buena base en tus finanzas personales. Por ello, quiero recomendarte un curso de educación financiera para jóvenes que quieran sumar nuevas herramientas a su vida y quieran emprender desde cero en el mundo de las finanzas, donde vas a poder conocer y trabajar:

  • Tu proyecto de vida: donde podrás conocerte a vos mismo, sobre el mercado laboral, conocimiento del dinero y de qué manera podés administrarlo.
  • El mundo laboral: formas de generar ingresos, y opciones laborales para el futuro.
  • Presupuesto: superávit, déficit y costo de oportunidad.
  • Gastos fijos, gastos variables, ahorro.
  • El papel que juega el ahorro en la consecución de los objetivos del propio proyecto de vida.
  • Toma de decisiones informadas a la hora de invertir sus ahorros.
  • Ahorro e instrumentos financieros básicos. Planificar los pasos de la bancarización.
  • Los instrumentos y criterios de crédito.

Este curso está pensado para que podás aprender a tomar decisiones informadas y vivir una vida financieramente sana, de manera que puedan crear una relación clara entre sus intereses de vida y proyectos, mientras paso a paso aprendés a crear presupuestos personales, familiares o reflexionás sobre la importancia de ahorrar.

El curso de educación financiera está dirigido a jóvenes entre 15 y 29 años, de Nicaragua y cómo sabemos la manera en que se mueve la tecnología actualmente, será completamente en línea. Si querés inscribirte al curso, solo da click acá:

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