Cada final de año, muchas personas se toman el tiempo de analizar lo que hicieron cada mes, las metas que lograron, lo que fue bien y mal… y en base a esto piensan qué metas proponerse para el siguiente año y qué cambios deben realizar para lograrlas.
Yo también lo hago. Pero no solo a nivel de vida y metas. Yo voy un grado más profundo y, cual empresa que analiza sus estados financieros cada año y los compara con los anteriores y con lo que habían presupuestado, yo lo hago con MIS FINANZAS.
¿Te suena extraño? ¿Intenso? ¿Dramático? ¿De pereza? Quiero decirte que encuentro este ejercicio no solo increíblemente útil, sino que es hasta divertido para mí.
Si cada final de mes me tomo el tiempo de analizar cómo me fue y de presupuestar el siguiente; cada final de diciembre, me tomo unas cuantas horas para analizar el año entero que está por irse y para presupuestar el nuevo.
El 2021 lo acabo de realizar y hoy te quiero compartir mis hallazgos.
En qué se me fue el dinero
- Los meses de mayores ingresos fueron Abril, Noviembre y Diciembre.
- Los meses de menores ingresos fueron Febrero y Agosto.
- En promedio, cada mes ahorramos el 10.3% de los ingresos. Con el mayor pico en Febrero, marzo, abril y diciembre que rondan el 15%.
- En promedio, cada mes destinamos 6.5% a las deudas. Con picos de hasta el 10% en agosto, Octubre y Noviembre. Estos meses no es que las deudas hayan subido, es que decidimos hacer abonos extraordinarios a las mismas.
- La categoría de gastos dónde más dinero se nos va es “Hogar y Servicios Básicos” con entre 36% y 40% de nuestros ingresos. Esto está bien, me hace completo sentido ya que acá está metida la renta, la alimentación y los servicios básicos.
- La siguiente categoría en la que más gastamos es en nuestros hijos. De nuevo, me hace completo sentido y así debe ser: uno tiene que usar su dinero en aquello que más le importa. Entre los 3 se nos va entre el 22% y el 25% de los ingresos, con montos bien diferentes para cada uno, empezando de mayor a menor.
- En Lorenzo es quien menos se gasta porque es un bebé jejeje: 3%. Entonces además de pañales, wipes y citas a la pediatra una vez al mes, no hay mucho más.
- El presupuesto para Luka creció este año porque entró al colegio. Por lo que en él se nos va más o menos un 8%-10% de nuestros ingresos. De esto, el 70% está relacionado con el colegio.
- Tenemos varias categorías de gastos con montos bien parecidos, que rondan el 5%-7% de nuestros ingresos:
- Vacaciones / Viajes: Este monto se vio inflado, sobre todo, por la estancia de Yass fuera del país.
- Entretenimiento: 5%. Tratamos de ser BIEN disciplinados con lo que gastamos en salidas y comidas fuera. Justo ayer Yass me decía que ese es mi gasto favorito y tiene toda la razón, jajaja. Si hay algo en lo que no me molesta gastar es en comer fuera. Por ejemplo, tenemos la tradición de ir a desayunar todos los domingos en familia y ¡me encanta! Si el dinero no es un problema y no estamos limitados, no me pesa ni un poquito esa salida.
- También en el día a día gastamos 5%. ¿Qué hay ahí? Nuestros seguros de vida anuales, que por cierto ya nos toca pagar en enero; el salón de belleza, la ayuda que damos a otras personas (Rescatando huellas, kiva, ayudas en momentos determinados a familiares, campañas de gofundme ahora que hubo tannnnntas por el tema del COVID, etc.), compra de ropa / maquillaje yyyyy los famosos gastos hormiga. Sí, los gastos hormiga se deben presupuestar.
- Nuestros gastos médicos también son del 5%-6%. OJO: esto no incluye a nuestros hijos -pues eso va dentro de sus propias categorías, si es que se llegaran a enfermar- sino que solo a nosotros dos. Gracias a Dios somos personas súper sanas, por lo que rara vez lo usamos. Pero nuestro seguro médico está dentro de esta categoría, lo que infla el monto.
- Finalmente, dedicamos menos del 1% a dos rubros, bien diferentes:
- Auto y transporte: la razón es sencilla. Prácticamente todo lo pagamos desde la empresa, al ser un gasto deducible. Combustible, seguro de auto, mantenimiento, etc.
- Suscripciones: Solo pagamos Netflix, jajaja.
Siempre podemos mejorar
Siempre, siempre hay espacio para mejora. Para aprender de nosotros, de cómo hemos actuado y gastado y de decidir qué queremos hacer diferente.
En mi caso, no quiero más dinero para salir a comer o comprar ropa. Pero sí quiero distribuir de mejor manera, esperando que el seguro médico que compramos en familia pueda ser internacional y no nacional, por ejemplo.
Y aunque no me mueven las salidas rápidas en el corto plazo, MUERO por viajar y hacerlo en familia. En mi mundo ideal, tengo suficiente dinero para hacerlo unas 2 veces al año. Una en pareja y otra en familia. Aun no estamos ahí, pero que no te quede duda que estamos trabajando para eso.
También tenemos la meta de la famosa casa, que hemos venido moviendo desde el 2018. Todo parece indicar que este año será FINALMENTE el año en que logremos construir. Y, claro, eso implicará un crédito hipotecario que cambiará nuestro presupuesto:
- Por un lado, el monto destinado a casa será mayor. Pues la hipoteca será más alta que lo que actualmente pagamos de renta.
- Por otro, ese dinero ya no quedará como “Hogar y servicios básicos”, sino que pasará a la categoría de “deudas” y eso hace que nuestros % cambien. Como siempre digo: tratemos de no dedicar más del 30% de nuestros ingresos a la deuda. Ahorita el monto es pequeño -5%-, ya con la hipoteca nuestra meta será que no pase de un 25%.
Finalmente, también será un año de mucha inversión en Plata con Plática como empresa. Y como toda inversión, uno no ve el retorno en 2 meses o un año. Así que el desafío de cómo nos organizaremos como familia sería interesante. Pero me emociona :).
¿Y vos? ¿Has hecho un análisis así de tus finanzas? Aun estás a tiempo de realizarlo este año. Y si no has llevado el control de tus gastos o hecho un presupuesto, estás en el tiempo PERFECTO para empezar tu 2022 con el pie derecho. ¡Comenzalo a presupuestar desde YA!