Freelancer: este mes cobro… este mes no

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Cada vez son más las personas en Nicaragua que se dedican al freelance. Quizás porque decidieron que querían tener mayor libertad al decidir sobre su tiempo y para quién trabajan, tal vez se cansaron de tener un jefe encima de ellos todo el día, o  a lo mejor porque el mismo mercado y la falta de empleos fijos los obligó, lo cierto es que el número de profesionales que trabajan por cuenta propia y que por lo tanto, no tienen un ingreso fijo, va en aumento.

El problema para muchos es cómo crear un presupuesto cuando se tienen ingresos variables cada mes. Ya sea que tengás un salario fijo mensual más algunos ingresos variables, o que tu entrada mensual sea completamente variable, necesitás tener un plan para tu dinero y para pagar tus facturas al final del mes.

Lo primero que necesitás es tener una idea de cuánto –en general- hacés mensualmente. Estoy clara que el ingreso no va a ser el mismo cada mes (sino, no sería freelance), por lo que te recomiendo que tomés tus ingresos del último año y los dividás entre 12. Así, te das una idea general de cuánto ganás, en promedio, mensualmente.

Ahora dale una mirada a tus gastos. Si con un ingreso fijo es necesario tener un presupuesto y saber en qué estamos gastando el dinero, con un ingreso variable es todavía más importante llevar un registro de nuestros gastos. Siempre es bueno llevar un presupuesto anual, dividido por meses. ¿Por qué? Porque así como hay gastos mensuales –renta, agua, luz, colegiaturas, comida, etc.-, hay otros pagos que los hacemos una vez al año –seguros de carro, impuestos, etc.- y que la mayoría de las veces, terminamos desembolsando el total en el mes que nos toca. ¿No sería más fácil ir separando cada mes una parte proporcional de ese pago anual? De esta manera, ya tenés listo tu presupuesto de gastos mensuales.

Lo más común es que aun teniendo un promedio de ingresos mensual, habrán meses en que ganés más y meses en que ganés menos. Claro, lo ideal sería que pudieras organizar tus trabajos y proyectos, de tal manera que podás cubrir todos tus gastos del mes; sin embargo, esto es sumamente difícil y la realidad es que el que trabaja por su cuenta termina acomodándose al horario de sus clientes.

¿Qué hacer entonces? Si resulta que este mes tuviste suerte y vas a tener un excedente de ingresos (esto es, un excedente con respecto al presupuesto de tus gastos), no te lo gastés. Conozco a muchos consultores que cuando tiene un “mes bueno” y se ven con varios cientos de dólares de más, deciden ir a celebrar y gastárselo en ropa, salidas, vacaciones, etc. Mejor, apartá ese dinero extra –de preferencia en una cuenta a parte para evitar tentaciones- y que te sirva para cuando llegue un mes de vacas flacas, en el que tus ingresos no alcancen a cubrir tus gastos.

Claro está que nadie tiene una bolita mágica que diga qué va a pasar el siguiente mes. A como puede ser que te caiga trabajo del cielo, puede ser que nadie quiera tus servicios. En este momento, empezás a hacer uso del guardadito de los meses anteriores, y así evitás pasar la tarjeta de crédito por tus gastos regulares.

Pero ¿qué pasa si mi guardadito ni siquiera me da para cubrir esos gastos? Entonces tenés que saber cuáles de tus gastos son prioridad y cuáles no. Es muy fácil acostumbrarse a lo bueno, ¿verdad? Y a veces tenemos productos y servicios en nuestras casas que creemos que son “básicos”, pero sin los que podríamos vivir perfectamente. Por supuesto que no estoy llamando a todos a una vida de frugalidad total, sólo digo que en condiciones críticas se requieren también, medidas críticas. Y esto quizás signifique que este mes le voy a bajar a las salidas al cine, voy a cortar el Internet en mi casa, o no voy a salir a comer a restaurantes.

Así, dentro de tu presupuesto tenés que tener claro a cuáles de esos gastos estás dispuesto a renunciar inmediatamente, en caso de no tener suficientes ingresos un mes cualquiera. La idea es que en meses de vacas gordas guardés el excedente, y que en meses de vacas flacas usés ese dinero para cubrirte… no para gastar de más ;).

¿Y a vos? ¿Qué otras ideas se te ocurren para mantener tus finanzas personales en orden cuando tus ingresos son variables?

P.D. Si apenas estás considerando si dedicarte al freelance, en este link podés llenar un test para saber si esto de trabajar por tu cuenta, es lo tuyo.

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